Entrevista a Juan Gerardo Cabrera.
Por Lautaro Emmanuel Moreno.
TRAS SU APASIONANTE PELEA ANTE BRODIE, CABRERA PIENSA EN PABLO ESTRELLA
Juan Gerardo Cabrera retornó a Argentina luego de la vibrante batalla que protagonizó frente al inglés Michael Brodie, en Manchester. El campeón nacional pluma relata puntillosamente la emocionante y equilibrada pelea que perdió por puntos, en veredicto unánime, a la distancia de 12 rounds. Además, aseveró que a pesar de la derrota, su figura obtuvo la adulación del público europeo y su nombre adquirió relevancia mundial.
"Apenas sonó la campana, -recordó el boxeador cordobés- el inglés salió a arrollarme. Le esquivé, primero, su mano izquierda; luego su derecha y le acerté un derechazo, que lo hizo tambalear". Esa dura embestida del argentino cambió el esquema táctico del británico, que tomó recaudos a la hora de atacar.
Durante el segundo segmento, un cabezazo de Brodie produjo una herida sangrante, en el cuero cabelludo, del entrenado por Julio García. Mientras su rincón trabajaba en el corte, Cabrera se alegró al percibir el ojo a medio cerrar del inglés.
"A partir de ahí, la pelea fue espectacular. De palo y palo. Ambos íbamos al frente y nos castigábamos duro", resaltó.
Tras tomar aire, su voz adquirió un tono autocrítico. "En el séptimo y octavo round, debí haberme tranquilizado un poco y moverme, amagar y esgrimir para aprovechar el cansancio de Brodie. Tendría que haber pensado más la pelea".
La razón por la cual se aferró a un sistema ofensivo fue porque "cada golpe que me pegaba en el brazo era aclamado por todo el estadio y, en cambio, se callaban en todas las manos que le metía en la cabeza".
Promediando la séptima vuelta, el monarca argentino conectó dos arremetidas que "no llegaron plenas, pero que lo dejaron sentido" a Brodie.
El físico del inglés comenzó a perder resistencia al cierre del noveno lapso. "En los últimos asaltos, (sospechosamente) a Brodie se le desataron los guantes, después las botas y así, pararon la pelea varias veces", dijo el hombre proveniente de Marcos Juárez.
Finalizó la contienda y todos los espectadores reconocieron la entrega emocionante de los púgiles. "El combate fue muy parejo, pero creo que me ganó bien. Aunque no se la llevó de arriba, porque su cara estaba desfigurada", reflexionó Cabrera.
Al momento de marcharse al camarín, el cordobés recibió las calurosas felicitaciones de los aficionados británicos y su representante Santos Nicolini recibió varias llamadas telefónicas elogiando al argentino.
"Estoy contento. Esta pelea fue muy importante, porque me demostró que estoy para cosas grandes. Tuve una buena actuación, dejé una buena impresión que me dejó bien parado a nivel internacional para el futuro", analizó Juan Cabrera, que deberá aguardar aproximadamente treinta días para que le cicatrice la estocada en el cuero cabelludo.
El cordobés visitará sus tierras durante el fin de semana y después volverá a entrenar en Castro Barros 75, pensando en desafiar al mendocino José Pablo Estrella, por el título sudamericano.
E-mail: morenolautaro@yahoo.com.ar
Por Lautaro Emmanuel Moreno.
TRAS SU APASIONANTE PELEA ANTE BRODIE, CABRERA PIENSA EN PABLO ESTRELLA
Juan Gerardo Cabrera retornó a Argentina luego de la vibrante batalla que protagonizó frente al inglés Michael Brodie, en Manchester. El campeón nacional pluma relata puntillosamente la emocionante y equilibrada pelea que perdió por puntos, en veredicto unánime, a la distancia de 12 rounds. Además, aseveró que a pesar de la derrota, su figura obtuvo la adulación del público europeo y su nombre adquirió relevancia mundial.
"Apenas sonó la campana, -recordó el boxeador cordobés- el inglés salió a arrollarme. Le esquivé, primero, su mano izquierda; luego su derecha y le acerté un derechazo, que lo hizo tambalear". Esa dura embestida del argentino cambió el esquema táctico del británico, que tomó recaudos a la hora de atacar.
Durante el segundo segmento, un cabezazo de Brodie produjo una herida sangrante, en el cuero cabelludo, del entrenado por Julio García. Mientras su rincón trabajaba en el corte, Cabrera se alegró al percibir el ojo a medio cerrar del inglés.
"A partir de ahí, la pelea fue espectacular. De palo y palo. Ambos íbamos al frente y nos castigábamos duro", resaltó.
Tras tomar aire, su voz adquirió un tono autocrítico. "En el séptimo y octavo round, debí haberme tranquilizado un poco y moverme, amagar y esgrimir para aprovechar el cansancio de Brodie. Tendría que haber pensado más la pelea".
La razón por la cual se aferró a un sistema ofensivo fue porque "cada golpe que me pegaba en el brazo era aclamado por todo el estadio y, en cambio, se callaban en todas las manos que le metía en la cabeza".
Promediando la séptima vuelta, el monarca argentino conectó dos arremetidas que "no llegaron plenas, pero que lo dejaron sentido" a Brodie.
El físico del inglés comenzó a perder resistencia al cierre del noveno lapso. "En los últimos asaltos, (sospechosamente) a Brodie se le desataron los guantes, después las botas y así, pararon la pelea varias veces", dijo el hombre proveniente de Marcos Juárez.
Finalizó la contienda y todos los espectadores reconocieron la entrega emocionante de los púgiles. "El combate fue muy parejo, pero creo que me ganó bien. Aunque no se la llevó de arriba, porque su cara estaba desfigurada", reflexionó Cabrera.
Al momento de marcharse al camarín, el cordobés recibió las calurosas felicitaciones de los aficionados británicos y su representante Santos Nicolini recibió varias llamadas telefónicas elogiando al argentino.
"Estoy contento. Esta pelea fue muy importante, porque me demostró que estoy para cosas grandes. Tuve una buena actuación, dejé una buena impresión que me dejó bien parado a nivel internacional para el futuro", analizó Juan Cabrera, que deberá aguardar aproximadamente treinta días para que le cicatrice la estocada en el cuero cabelludo.
El cordobés visitará sus tierras durante el fin de semana y después volverá a entrenar en Castro Barros 75, pensando en desafiar al mendocino José Pablo Estrella, por el título sudamericano.
E-mail: morenolautaro@yahoo.com.ar
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