Entrevista a Víctor Angel Toledo.
“¡ME ROBARON!”
Exclamó el novato Toledo, sobre el fallo unánime que lo dio ganador a Giménez.
El increíble veredicto unánime que le dio la victoria a Rolando Giménez no preocupa en demasía a Víctor Angel Toledo (56,050 Kg) Este morocho de ojos vivaces y sonrisa amplia sabe que el buen rendimiento que exhibió en su bautismo en el campo rentado, causó una positiva impresión. “¡Me robaron!”, exclamó acompañado por una carcajada compulsiva.
“No estoy para nada de acuerdo con el fallo –opinó Polvorita- Para ser el debut, me mataron”.
Toledo confesó que ascendió al cuadrilátero muy nervioso, pero “apenas empecé a pelear, me serené y lo quería sacar. Cuando lo tiré en el primero creía que no se levantaba más. Pero se recuperó y después me desesperé y no lo pude noquear”.
“Trataba de esquivarle las piñas duras de Giménez, porque si me quedaba quieto me podría haber tirado”, dijo el joven que viaja desde Rafael Castillo a Carupá, durante dos horas, para entrenar en la Sociedad de Fomento Mariano Moreno.
“Sentí la mano al final del primero y en el tercero, pero me recuperé enseguida”, agregó el novato, que a través de su rendimiento se ganó un lugar en un festival a desarrollarse en agosto.
“Me voy contento –sostuvo Toledo- y la próxima pelea voy a ir en 54 Kg. Allí, no regalo categoría y voy bien afilado”.
“Hay que seguir adelante. Atilio y Alejandro (Rondolini) me apoyan mucho y no los voy a defraudar”, aseguró el bonaerense, que dejó atrás dos años de inactividad, por culpa de una fractura en su nudillo derecho.
Al momento de marcharse, Toledo recibió elogios y felicitaciones por su actuación. Lamentablemente un fallo injusto lo dejó sin su merecida victoria, sin embargo obtuvo lo más difícil en un debut: ganarse el respeto de la afición.
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